por M.Sc. Hernán Frigolett

El análisis de la economía regional puede abordarse desde las dos perspectivas que configuran la respuesta de la producción: las condicionantes de la oferta, o bien las condicionantes de la demanda, prosiguiendo por la vertiente del mercado como mecanismo asignador de recursos y de confluencia de los hábitos de consumo del presente y del futuro.

Si nos centramos en la perspectiva de la demanda, son tres los “drivers”* del crecimiento de la producción local: I) las exportaciones; II) las inversiones; III) el consumo. Usualmente, es el flujo de demanda por bienes y servicios que emana de los hogares el que tiene el mayor impacto sobre el desempeño productivo de la región, y al mismo tiempo es el componente de la demanda interna que sirve de estabilizador de la actividad económica local.

Lograr una aproximación al gasto agregado de los hogares ya requiere de procesar diversas fuentes de información, con un elevado costo de producción, y disponer de registros que identifiquen sus gastos con mayor detalle es aún más dificultoso y caro. Sin embargo, el año 2017 es especial desde la perspectiva de los estudios realizados por el Instituto Nacional de Estadísticas con respecto a los hogares porque coinciden tres levantamientos de gran relevancia: 1) Censo de Población; 2) Encuesta Suplementaria de Ingresos; 3) Encuesta de Presupuestos Familiares.

Así, es posible articular un modelo de telaraña que permite construir los contornos característicos de los hogares y de las personas que los conforman para establecer tres niveles analíticos de interés para el desarrollo económico regional:

Primero el potencial de gasto agregado derivado de la determinación de los ingresos percibidos por hogar para cada una de las personas integrantes en edad de trabajar y que están ocupados a jornada completa o parcial. Segundo la cuantificación de la demanda de los hogares por tipo de producto (bien o servicio) para determinar la incidencia en los mercados regionales. Y tercero la calibración más certera de las estimaciones de inferencia gracias a la existencia de un censo de población que logra un conteo más preciso de personas en los hogares de la región.

Lograr una adecuada calibración requiere de un estudio que permita una revisión de las inferencias aplicadas en los estudios muestrales, que en el caso de la Región de Los Lagos se materializan en el estudio de Matriz de Insumo Producto Regional. En el levantamiento inicial precursor de este tipo de estudios, se cuenta con los resultados de la ESI y del Censo de población que sirve para mostrar resultados de las inferencias estadísticas realizadas cuando se las confronta con un conteo directo de los hogares mediante un ejercicio censal.

En la tabla de síntesis siguiente, se muestra el resultado de la última estimación disponible con compilación regional de la Encuesta Suplementaria de Ingresos del año 2017 que reporta el potencial de gasto e indicadores de distribución relativa del ingreso.

Síntesis de Caracterización Económica de los Hogares

Fuente: Elaboración propia basada en Encuesta Suplementaria de Ingresos de los Hogares

Al igual que al nivel nacional, la compilación de la información de ingresos percibidos por los hogares refleja un problema distributivo que se desprende de la fuerte brecha que se evidencia entre la estimación de la media de los ingresos con respecto a la mediana de ingresos.

El factor de brecha media/mediana muestra que la desviación es de 1,36 veces, consignando un problema de concentración de los ingresos laborales que es altamente probable que se profundice cuando se asignen los ingresos no laborales y que darían cuenta del coeficiente de Gini para la región.

En el sustento de esta ficha sinóptica de los ingresos de los hogares, está la estimación de los ingresos que obtienen distintas categorías ocupacionales. Se presentan, en la tabla siguiente, las categorías más relevantes desde la perspectiva de la ocupación regional total considerada en el último trimestre (octubre a diciembre) del año 2017:

 Ingresos por Categoría de Ocupación

Fuente: Encuesta Suplementaria de Ingresos

La brecha entre media y mediana es muy similar en todas las categorías de ocupación, y en términos de brecha entre categorías los ingresos medios de los empleadores duplican el de los asalariados, y el de estos duplica el ingreso medio de los trabajadores por cuenta propia.

Ahora bien, el censo de población de abril de 2017 muestra algunas diferencias con respecto a la estimación de la población que está considerada en la inferencia estadística aplicada a la encuesta de empleo e ingresos del INE.

La población censada ascendió a 828.708 personas en un total de 293.316 viviendas particulares ocupadas al momento de la visita del encuestador. La inferencia de la población total de la ESI estimó en 939.126 la cantidad de personas, estableciendo así una brecha de 110.000 personas la cuantificación de la población de la región. Habrá que lograr el impacto de esta brecha con respecto a la distribución entre población en edad de trabajar y los que se consideran inactivos, y en las respectivas tasas de participación y ocupación para la región. Se deben consultar otras fuentes adicionales que dan cuenta de ocupación efectiva, como los registros administrativos y las declaraciones de impuestos de las empresas de la región para establecer una estimación de mayor congruencia entre fuentes.

La caracterización de la pobreza en la región es preocupante por cuanto 25% de los hogares estarían catalogados como pobres de acuerdo con la clasificación multidimensional, lo cual es bastante congruente con el indicador de mediana de los ingresos que muestra que 50% de los hogares no logra llegar a los 650.000 pesos mensuales. Así, se puede estimar que el ingreso promedio de los hogares pobres no logra superar los 400.000 pesos mensuales.

*Drivers es el término que en inglés se utiliza para definir los elementos que impulsan o incitan respuestas de una determinada variable, en este caso el crecimiento de la economía regional.

Foto: Rosario Lizama. Mercado de Dalcahue. Con Licencia CC