- El académico de la ULagos e investigador del CEDER participó en el conversatorio “¿Por qué y cuánto debe Chile invertir en patrimonio y cultura?” que organizó el Instituto Libertad.
Con el objetivo de reflexionar sobre la relevancia del patrimonio cultural para nuestro país, en el marco del proceso constitucional, este 30 de septiembre se realizó el conversatorio “¿Por qué y cuánto debe Chile invertir en patrimonio y cultura?”.
El encuentro, organizado por el Instituto Libertad, contó con la participación del académico de la ULagos e investigador del CEDER, Hernán Frigolett. También expusieron Rayén Carimán, vocera del Parlamento Indígena del Maule; Jorge González, presidente nacional de ANFUCULTURA; Virginia Benítez, investigadora en Enseñanza Artística; Pablo Gaete, director Centro Cultural Balmaceda Arte Joven Biobío; Bernardo Jorquera, vicepresidente nacional ANFUPATRIMONIO. Moderó, Iván Pérez, coordinador Programa Patrimonio Cultural Instituto Igualdad.
En su presentación, Hernán Frigolett criticó el poco apoyo que hay en Chile hacia las y los jóvenes con talento: “Vemos una situación bastante precaria en nuestro sistema educacional donde a nivel escolar no hay un ambiente en el cual se cultive y se desarrolle el talento de nuestros jóvenes, en distintas expresiones artísticas”, sostuvo.
Asimismo, reprochó el escaso financiamiento para proyectos culturales: “En los fondos concursables la cantidad de proyectos que se presentan versus los pocos proyectos que se financian es abismante; en 2018 postularon aproximadamente 16 mil proyectos y se aprobó financiamiento solo para 3 mil, con un magro presupuesto de 28 mil millones de pesos”, señaló.
Agregó que “si vamos a los Fondart, también la relación es bastante pobre (…) se presentaron aproximadamente 6.500 iniciativas y se financiaron apenas 1.200, con un presupuesto de 13 mil millones de pesos; eso es bastante poco”.
Junto con ello, Frigolett aseguró que desde el punto de vista Fiscal, el presupuesto es muy menor: “Chile tiene dos cosas en las cuales se caracteriza, de ser bastante pobres sus esfuerzos a nivel colectivo: una tiene que ver con investigación, desarrollo e innovación donde a duras penas estamos gastando algo así como el 1,2% del PIB y la mayor parte la hace el sector público; y en el caso de la cultura, el presupuesto no llega al 1% (…) tenemos que hacer algo que nos permita resaltar y ahí la acción pública es clave”, puntualizó.
Además, recalcó que en Chile todavía existe un centralismo muy exacerbado: “Siendo Chile un país tan diverso desde el norte hasta el sur austral, hay un cruce cultural, incluso de nuestros pueblos originarios (…) costumbres que se han ido arraigando y que han ido desarrollando distintas organizaciones sociales y culturales que están en esas regiones y obviamente para ellos la situación es bastante más desigual”, precisó.
Por último, el académico reflexionó enfatizando que espera que la nueva Constitución parta de cero en ese ámbito, “con una convención constitucional que permita que vayan siendo elegidos constituyentes que vengan desde distintas realidades, y la cultura haga el esfuerzo, busque sus candidatos y busque estar ahí presente en mayor cuantía que la que le damos desde el punto de vista de los indicadores económicos y los indicadores presupuestarios”.
El conversatorio “¿Por qué y cuánto debe Chile invertir en patrimonio y cultura?” se puede revisar aquí.
https://www.facebook.com/institutoigualdad/videos/255122629138044
