Los arquitectos Paulina Alvarado y Alberto Calzolari dieron a conocer los principales datos sobre el origen, incidencias y cambios en su propiedad, del inmueble que actualmente alberga a la sede Santiago de nuestra Universidad.
Luego de varios meses de búsqueda de información a través de documentos y testigos, los arquitectos expertos en investigación histórica, patrimonio, restauración y conservación, Paulina Alvarado y Alberto Calzolari, dieron a conocer los resultados de las pesquisas sobre el origen, incidencias y cambios en su propiedad, del edificio patrimonial de República 517, inmueble que actualmente alberga a la sede Santiago de nuestra Universidad.
La recopilación de datos se inició en marzo pasado, luego que los profesionales se adjudicaran un Fondart (Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes N°457897) financiado por el ex Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
Alberto Calzolari puntualizó qué los motivó investigar el origen del edificio: “Nos interesó porque tiene una historia poco clara respecto a su construcción y sus funciones, y también porque se sitúa en un barrio donde a finales del siglo XIX se establecieron muchos empresarios y familias prestigiosas e importantes de Santiago”, precisó.
Respecto a los principales datos de la investigación, el arquitecto destacó que lograron establecer que la Municipalidad de Santiago adquirió el predio ubicado en República y Toesca en 1908. Luego, bajo el gobierno de Ramón Barros Luco, se decretó la construcción del inmueble el 27 de junio de 1912, iniciando obras al año siguiente.
“El edificio, que es de una tipología de palacete ecléctico, había sido destinado a ser escuela pública con una capacidad de unos 650 alumnos. Tras su inauguración, en 1918, se instaló hasta 1933 la Escuela de Arquitectura de la U. de Chile”, aseguró Calzolari.
Asimismo, indicó que aún no hay datos certeros de cuándo se construyó el edificio donde actualmente se ubican el CEDER y Secretaría de Estudios, aunque estima que data de la década de 1920.
A su vez, precisó que en 1934 la Escuela de Arquitectura “se trasladó a la plaza Ercilla y el edificio pasó a ser ocupado por la Facultad de Comercio y Economía Industrial de la U. de Chile en 1935, cuyo decano era Pedro Aguirre Cerda”.
Por su parte, Paulina Alvarado aclaró que “en nuestra investigación nos quedaron algunos vacíos porque hay documentos que no aparecieron; entre ellos, la fecha exacta de cuándo llega la Facultad de Economía de la U. de Chile a este edificio”.
En ese contexto, señaló que estiman que ese hecho habría sido en 1940, luego que la Universidad de Chile adquiriera definitivamente el edificio desde el Estado chileno. Igualmente, aclaró que la embajada japonesa se ubicó en República 498, descartando cualquier vínculo con República 517.
Tras ello, indicó “la universidad compró inmuebles dentro del barrio y los usó para distintos servicios que ofrecía la misma institución, como pensionados, bibliotecas, oficinas y canchas”.
Dictadura
Posteriormente, tras el Golpe de Estado en 1973, la arquitecta recalcó que el edificio “vio afectado su funcionamiento normal hasta que en 1978 fue usurpado por agentes de la recién creada CNI y fue transformado en el cuartel central. También ocuparon otros edificios del barrio que pertenecían a la U. de Chile”.
Del mismo modo, Paulina Alvarado enfatizó que “hubo testigos que entrevistamos quienes nos aseguraron que sí hubo prisioneros y actos de tortura en el zócalo, y que se subieron las rejas del perímetro”.
Agregó que “en 1984 se traspasaron todos los edificios de la U. de Chile al Serviu. Pero en 1989 los edificios quedaron abandonados cuando terminó la dictadura, hasta que en 2002 la U. de Los Lagos compró el edificio de República 517”.
Finalmente, en sus conclusiones, Alberto Calzolari remarcó que “nos parece interesante destacar que la institución, la Universidad de Los Lagos, al comprar este edificio reconoció su importancia al encargarse de su tutela”.
Acotó que “también queremos destacar la protección del Barrio República por parte de la Municipalidad de Santiago, al declararlo zona típica en 1992. Luego se declaró Zona de Conservación Histórica por lo que el edificio pasó a ser un Inmueble de Conservación Histórica (ICH)”.
Cabe señalar que la actividad contó con la presentación del arquitecto Lorenzo Berg, quien destacó el trabajo de los arquitectos como también la infraestructura del edificio patrimonial.
“El edificio principal pronto va a cumplir un siglo y no es algo menor, porque Chile al ser un país tan sísmico son pocos los edificios que duren tanto; aunque tras el terremoto de 2010 quedó bastante herido pero siguió en pie y con sus estructuras impecables”, sostuvo.
