- Los textos, escritos por el académico ULagos, Dr. Jorge Weil, describen su experiencia y la de otros prisioneros políticos en distintos centros de detención del país.
El Dr. Jorge Weil Parodi, académico del Depto. de Gobierno y Políticas Públicas de nuestra Universidad, no solo fue testigo, sino que fue protagonista del lado más crudo de la dictadura. Fue detenido por la DINA el 1 de febrero de 1975 y permaneció secuestrado en el “Cuartel Terranova-Villa Grimaldi”, en Peñalolén. Después, entre marzo de 1975 y el 17 de noviembre de 1976 estuvo retenido en los campos de concentración de prisioneros políticos de Tres Álamos-Puchuncaví, en la región de Valparaíso.
Estuvo 655 días privado de libertad, 26 de ellos sometido a torturas. Esa experiencia fue la que lo llevó a escribir tres libros: “Campo de Concentración de Prisioneros Políticos de Puchuncaví”; “Al filo de la parrilla en el cuartel Terranova-Villa Grimaldi”; y “Los derechos humanos en la provincia de Llanquihue 1973-1990”.
En ese marco, coincidiendo con los 50 años del Golpe de Estado, los textos fueron presentados este 18 de agosto en la Sede Santiago. Los comentarios estuvieron a cargo del académico de la Sede y del Depto. de Gobierno y Políticas Públicas, Dr. Rodrigo España Ruiz, quien sostuvo que se sintió “muy identificado” con los testimonios presentes en los libros porque sus padres también habían sido prisioneros políticos durante la dictadura.
Precisó que también tenía “otra aproximación más académica con los libros; mi tesis doctoral tiene que ver con el proceso de aproximación democrática en Chile, y uno de los capítulos está relacionado con la problemática de Derechos Humanos”.
Aseguró que los textos narran abiertamente “las características y los rasgos distintivos que tienen las violaciones a los DD.HH. durante la dictadura; eso no fue simplemente un exceso, no fue algo desorganizado, sino que fue una política de Estado que contó con todos los elementos que una política pública pueda tener respecto a eso”.
Agregó que “esa política de Estado, que ha estado presente durante el proceso de consolidación, ha impedido que podamos avanzar en una extensión y profundización democrática mucho más potente en el régimen político chileno”.
Asimismo, subrayó que los libros “tienen la gracia de hacer una mirada política reflexiva sobre los acontecimientos previos al Golpe, sobre los acontecimientos políticos y las condiciones que se dieron durante la dictadura, pero también nos muestra la problemática en casos bien concretos respecto de las violaciones de los DD.HH.”
Respecto a la obra “Los derechos humanos en la provincia de Llanquihue 1973-1990”, que da a conocer lo que vivieron algunos exprisioneros del antiguo cuartel de la Policía de Investigaciones de Puerto Montt, remarcó que tiene “todos los méritos que son necesarios respecto de establecer la verdad, de hacer un llamado de recuperación de la memoria, de tratar de establecer algún tipo de reparación simbólica y, además, contextualizar en una región que fue bastante sacudida por la violación a los DD.HH. como lo fue la región de Los Lagos, y en particular la provincia de Llanquihue”.
Finalmente, invitó a leer los libros: “Detrás de cada una de las historias hay personas que sufrieron cosas que no se pueden sufrir bajo ningún contexto y bajo ninguna justificación”, cerró.
Por su parte, el Director de la Sede Santiago, Dr. Ricardo Vega Bois, quien estuvo presente en el encuentro, felicitó al Dr. Weil por los textos, y afirmó que “todos de una manera u otra hemos vivido y conocido parte de la historia, pero todavía es impresionante conocer o volver a escuchar detalles. Me tocó estar en la Vicaría de la Solidaridad coadyuvando en algo en la ubicación de algunas personas y había que tener mucha fortaleza para recoger testimonios y saber lo que estaba pasando. Mi participación fue corta; no tuve la fuerza porque había una política del terror muy fuerte y muy terrorífica”.
Museo de la Memoria
Consultado el Dr. Weil sobré por qué decidió contar estas experiencias, suyas y de exprisioneros políticos, indicó que en el Depto. de Gobierno y Políticas Públicas “nosotros nos ocupamos de cómo funciona el Estado y, por tanto, me pareció que caracterizar el rol del Estado y de cómo se administró en el período 1973-1990 era algo relevante”.
En cuanto a los relatos de los exprisioneros políticos de Puerto Montt, el Dr. Weil precisó que el excuartel de la Policía de Investigaciones de Egaña 60, que había sido centro neurálgico de la represión para las provincias de Llanquihue y Chiloé, fue declarado sitio de memoria hace algunos años “y para que el Estado lo transforme en un museo regional de los Derechos Humanos y de la Memoria, se requiere de un relato, de una historia de lo que ahí había ocurrido. Y las asociaciones de exprisioneros y quienes están a cargo del edificio, me pidieron hacer ese relato. A mí me pareció pertinente hacerlo desde la declaración de los actores, es decir, desde los testimonios de la gente que sobrevivió”.
Así fue cómo recolectó procesos y declaraciones “tanto de los agentes que actuaron como de los prisioneros que sufrieron los martirios y las privaciones de ese periodo, y particularmente lo que ellos rehicieron posteriormente en la excárcel de Chinchín”.
Sobre la posibilidad que se concrete la construcción del museo en el corto plazo, señaló que “el diseño está, lo hizo una empresa constructora con un especialista en museología; solo faltan los fondos para ejecutarlo”.
Sede Santiago
El Dr. Weil fue estudiante de Economía en la Sede Norte de la U. de Chile en República 517 (actual Sede Santiago de la ULagos) desde 1969 hasta el 11 de septiembre de 1973. Poco después, en 1974, vivió una situación «anecdótica»: “En la clandestinidad, me llegó una carta a través de mis padres diciéndome que me presentara en la Sede porque me iban a expulsar de la universidad. No me presenté porque claramente era para tomarme preso”, dijo.
Por último, el Dr. Weil recordó que los estudiantes de la Sede Norte jugaron un rol importante para la reforma de la U. de Chile. “En mayo de 1968 fue la toma de la Casa Central de la U. de Chile (…) y la reforma empezó en 1969 y yo llegué justamente en plena discusión de esa reforma. Entonces en esas discusiones incluso peleas por la reforma, donde estaba la triestamentalidad, hicimos un gran movimiento a principios de 1970 para constituir la gran Facultad de Ciencias Sociales, y acá la Sede estuvo tomada casi dos meses”, concluyó.
Publicado por: Andrés Zanetti