La iniciativa permitirá proteger legalmente las invenciones que se generen al interior de la Universidad.

Hace un mes empezó a operar el Comité de Propiedad Intelectual e Industrial bajo la dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica de la Universidad de Los Lagos, cuyo objetivo es poder deliberar y asesorar a esta dirección acerca de la conveniencia de solicitar un título de protección: patentes de invención, modelos de utilidad, registros de marcas, entre otras acciones pertinentes.  Complementariamente este comité tiene la misión de validar la constitución de Empresas Innovadoras y/o de Base Tecnológica (EIBT). Así lo explica el director de Innovación y Transferencia Tecnológica de la ULagos, Marcos Hernández, quien sostiene que este comité es un órgano que aparece descrito en el reglamento de propiedad intelectual e industrial de la Universidad de Los Lagos.

La primera reunión de este comité se realizó en diciembre 2022 entre todos sus integrantes, conformados por: la directora jurídica (Cecilia Varela), un representante del consejo universitario (profesor Raúl Arredondo), 3 funcionarios de la universidad designados por el vicerrector de Investigación y Postgrado (Sergio Arce, Biblioteca; David Silva, Departamento de Recursos Naturales; Hernán Álvarez, vicerrectoría de Administración y Finanzas), un representante de la Oficina de Transferencia y Licenciamiento, Claudia Pérez y el director de Innovación y Transferencia Tecnológica, Marcos Hernández.

Desde este mes de enero y como ya quedó funcionando este comité, se podrá empezar a operar de manera regular tramitando los resultados de investigación que la universidad considere se deberían enviar a protección.

“Va a ser muy importante porque este año se espera crear las primeras empresas innovadoras y/o de base tecnológica de la Universidad de Los Lagos y por reglamento este comité es quien revisa esta solicitud y hace la sugerencia a la universidad de respaldar o no la creación de empresas que sean impulsadas por investigadores e investigadoras ULagos, funcionarios no académicos de la universidad, estudiantes de pre y postgrado que toman resultados de investigación y ven en ellos la posibilidad de levantar un emprendimiento de este tipo, lo que  puede hacer en asociatividad con la universidad”, indica Hernández.

Las empresas innovadoras y/o de base tecnológica corresponden a una persona jurídica nueva liderada por un integrante de la comunidad universitaria que necesariamente debe pasar por este comité para evaluar su curso y desarrollo.

CÓMO OPERA

Cualquier integrante de la comunidad ULagos, especialmente investigadores e investigadoras que sea responsable de una creación, descubrimiento o invención con potencial para ser protegible intelectual o industrialmente debe comunicarlo a la Dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica. Otra vía es a través del monitoreo que hace de forma permanente la Dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica a las actividades de investigación que produce la universidad donde es posible reconocer resultados importantes de proteger.

“Nuestra Dirección tiene la misión también de difundir de manera amplia los reglamentos de protección de propiedad intelectual e industrial, los reglamentos de creación de empresas innovadoras y/o de base tecnológica, para que se tome conciencia de lo importante que es ir protegiendo los resultados de investigación y/o generando empresas que aprovechen los resultados de este tipo de actividad”, agrega Marcos Hernández.

Según sostiene- a fines de 2023 se evaluará el desempeño de este primer año de funcionamiento y se verá si es necesario hacer cambios o ajustes. Este comité se rige por un reglamento y un marco regulatorio que está establecido por la política de innovación y los reglamentos de propiedad intelectual e industrial y de creación de empresa innovadoras y/o de base tecnológica. Se espera que en marzo se pueda contar con un reglamento de funcionamiento interno, así como también, con las primeras discusiones respecto a los resultados de investigación que hoy día la dirección de innovación ya tiene a la vista para ver si es necesario proteger o no.

“Acabamos de cerrar contrato con la empresa Cooper que nos va a asesorar como universidad en los procesos de protección, asimismo, trabajaremos a contar de marzo con otra oficina de abogados, Carey, expertos en solicitar protección de propiedad intelectual. Entonces el comité toma los resultados de investigación que sean necesario proteger, decide si los vamos a proteger como universidad y después la Dirección de Innovación toma esos resultados de investigación y gestiona lo que corresponda con las oficinas de abogados que están asociadas con nosotros”, explica el director de Innovación y Transferencia Tecnológica de la ULagos.