En el marco del Ciclo de Diálogos Magistrales “Perspectivas interseccionales sobre feminismos y territorios”, la Dirección de Pueblo Originarios y la Dirección de Género presentaron el libro “Mujeres herederas de saberes y haceres del campo«. En esta oportunidad se destacó el rol fundamental que juegan día a día las mujeres rurales e indígenas por mantener una vida y cultura campesina como sostén de la soberanía alimentaria de los pueblos.

La actividad contó con la participación de María Lincoman de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (ANAMURI), Deisy Cona Seguel, docente, profesional de la Dirección de Pueblos Originarios y participante de la Mesa de Género de la sede Chiloé y Carlina Gisell Sánchez Pairo, secretaria de cultura y extensión de la Federación de Estudiantes ULagos (FEUL) sede Chiloé. Las tres especialistas abordaron las necesidades y desafíos para la defensa de la Itrofil Mongen (biodiversidad) en el tiempo contemporáneo.

En ese contexto, Carlina Gisell Sánchez, integrante de la FEUL Sede Chiloé, proveniente de la comuna de Quellón, del territorio williche Fundo Huaipulli de Compu, valoró la presentación del texto indicando que “el libro fue un recorrido de memoria de saberes ancestrales que guardan mujeres de diversos territorios y con solidaridad los comparten (…) mi abuela era huertera, ella intercambiaba semillas con sus vecinos, y para mí es muy importante que estos saberes queden registrados en un libro porque ella falleció de Alzheimer, perdiendo  la memoria sobre muchos conocimientos que hoy se exponen en este libro ”..

Carlina afirmó así que las nuevas generaciones cumplen un rol fundamental, por lo tanto, “sería muy importante que la universidad pueda preparar a sus estudiantes para enfrentar la realidad con conciencia, pensamiento crítico y respeto hacia la tierra involucrando a los estudiantes en voluntariados territoriales”. 

Por su parte, María Lincoman, productora mapuche williche del Fundo Coihuin de Compu, subrayó que el traspaso de conocimientos de generación en generación es clave para la mantención de saberes ligados al campo: “aprendí desde muy niña a trabajar el campo por acompañar en las actividades agrícolas familiares que realizaban mis padres. En ese tiempo, trabajar y producir alimentos era lo principal, pues no se compraba nada de los supermercados (…) las generaciones actuales no saben sembrar, producto del cambio en las formas de vida y también porque los padres no les enseñaron, con eso ya comenzó a extinguirse una tradición chilota williche relacionada con la agricultura”.

En la misma línea, Deisy Cona, docente y miembro de la Dirección de Pueblos Originarios, valoró la experiencia de las mujeres campesinas en torno a la producción agrícola, destacando que “durante la pandemia fue muy importante los canales de comercialización que han seguido generando gracias a la producción de alimentos de mujeres campesinas, por esa razón lo que muestra este libro es muy importante en términos de relevar la defensa del itrofill mongen y defensa territorial que vienen realizando las mujeres frente al avance de proyectos contaminantes de la naturaleza”.

Finalmente, Silvia Castillo, Directora de la Dirección de Pueblos Originarios, cerró la jornada señalando que “la ULagos, puede contribuir desde las comunicaciones y la educación en sensibilizar a los jóvenes que ingresan a la Universidad, enfatizando en los elementos socio históricos que tiene el archipiélago de Chiloé, se puede ayudar realmente a seguir reafirmando las particularidades y riqueza cultural que tiene Chiloé”, concluyó.