Ante más de 500 personas y con la asistencia de profesionales del área de la salud, médicas y no médicas de diversos países, 8 estudiantes de Psicología (Departamento de Ciencia Sociales) expusieron en el 1er Congreso Internacional de Geriatría y Gerontología realizado en la Universidad San Sebastián Valdivia, en el Centro de Convenciones del Hotel Villa del Río, Valdivia. 20 a 23 de noviembre 2018. (ver programa)
A través de la presentación “Escolaridad y estado cognitivo en adultos mayores urbanos y rurales de Osorno”, las estudiantes Carolina Acum, Andrea Colpi y Fabián Valdés, presentaron los detalles de un proyecto que busca determinar sí la escolaridad afectaba el desempeño cognitivo de los adultos mayores rurales y sí se observaban diferencias significativas respecto de ancianos urbanizados.
Los resultados del estudio señalaron que los adultos mayores rurales mostraron un desempeño inferior en todos los instrumentos administrados, pero con mayor significancia en el test que mide estado de ánimo; revelando que la escolaridad influyó significativamente en el desempeño de todos los sujetos, particularmente en el test que mide el estado cognitivo (el Mini-Mental).
Los estudiantes Ángel Guarda, Hugherid Ahumada y Paloma Meriño, presentaron “Polifarmacia y Deterioro Cognitivo en Chile”, un trabajo que buscó medir el efecto de la polifarmacia en el rendimiento cognitivo y deterioro funcional de un grupo de personas mayores de Osorno (80 personas mayores de 60 años con polifarmacia y 78 sin polifarmacia, cognitivamente saludables).
Este segmento con polifarmacia obtuvieron desempeños cognitivos bajos, patognomónicos de alteraciones cognitivas (48,3%), deterioro cognitivo leve (39,6%) y estados pre clínicos de enfermedad de demencia leve (12,1%). Lograron demostrar y concluir que, al parecer, el consumo excesivo de fármacos afectaría la cognición y podría estar explicando el surgimiento del deterioro cognitivo y la demencia.
En el tercer poster: “Estado Cognitivo de adultos mayores de Osorno que viven en la comunidad y no asisten a controles EMPAM”, los estudiantes Camila Urra y Francisco Burgos presentaron un estudio que analizó las diferencias cognitivas entre un grupo de adultos mayores que viven en la comunidad y asisten a los controles del EMPAM vs un grupo que no asiste a los controles. Fueron incluidos al estudio 120 adultos mayores que viven en la comunidad (Osorno), es decir, que viven solos o con sus respectivas familias o parejas, auto valentes en todas las dimensiones de la vida y sin queja cognitiva o deterioro cognitivo. Los resultados no encontraron diferencias entre los grupos de estudio, en cuanto al desempeño cognitivo. Sin embargo, del grupo de personas mayores que asisten a los controles, un grupo de éstos presentó desempeños cognitivos deficientes pero no patológicos; es decir, declives cognitivos leves.
La asistencia de los estudiantes mencionados fue gracias al apoyo del profesor, Norman López, quien dictó la Conferencia: Consideraciones en el proceso diagnóstico del Deterioro Cognitivo y la Demencia en Chile”, donde explicó un algoritmo diagnóstico (procedimiento), validado científica y técnicamente (de mayor consenso internacional), para objetivar el deterioro cognitivo y la demencia, tanto en los centros de Atención Primaria en Salud (APS), como en el nivel secundario, de mayor complejidad, como Hospitales, por ejemplo.
Luego de eso, se centró en algunos de los problemas más comunes que aparecen en la literatura científica para la detección del deterioro cognitivo, el deterioro cognitivo leve (DCL) y la demencia en APS.En muchos de los casos, la evidencia sugiere que los profesionales de APS no logran diagnosticar el deterioro cognitivo leve, ni la demencia leve a moderada, al menos en el 50% de las veces (Valcour, 2000; Kaduszkiewicz et al., 2010). Una de las causas está relacionada con los tiempos y volúmenes de atención, las dificultades de formación, la falta de instrumentos útiles y la alta rotación laboral al interior de los equipos profesionales de APS, que dificulta el trabajo (Youn, 2011; Paddick, 2017), comenta López.
En su intervención destacó que el conocimiento o diagnóstico del tipo de condición cognitiva que padezca un adulto mayor es necesario y permite activar los canales para la intervención. Los tiempos de atención, así como la disponibilidad de exámenes complementarios, de mayor complejidad, como imágenes cerebrales, llegar a ser un tanto amplios en el sistema público, convirtiéndose en un desafío importante para el proceso diagnóstico y terapéutico del deterioro cognitivo y la demencia.
Publicado por: Catalina González Tringa