La ceremonia contó con la participación del presidente del Senado, Carlos Montes, y de autoridades, académicos, docentes, funcionarios y estudiantes de nuestra Universidad.
Este martes 24 de abril se realizó en la Sede Santiago la inauguración oficial del año académico 2018, con la presencia de autoridades, académicos, docentes, funcionarios y estudiantes de nuestra Universidad.
La ceremonia también contó con la participación del director ejecutivo de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica, Conicyt, Christian Nicolai Orellana y del presidente de la Cámara Alta, senador Carlos Montes Cisternas, quien ofreció la clase magistral “A cien años del Grito de Córdoba y a cincuenta años de Mayo de 1968, ¿qué desafíos reformistas en materia de educación hay para el Chile de hoy?”.
El director de la Sede Santiago, Dr. Marcel Thezá Manríquez, destacó en su discurso el origen de nuestra Universidad en 1993 y del Instituto Profesional de Osorno en 1981, institución antecesora a nuestra Casa de Estudios.
“Esta ceremonia se constituye en una de las primeras actividades oficiales conducentes a la conmemoración de los 25 años de vida de una institución profundamente comprometida e imbricada con todos los procesos experimentados por las universidades del Estado en estas casi cuatro décadas”, precisó.
Asimismo, señaló que la Universidad de Los Lagos, ha respondido al compromiso de cumplir un conjunto de objetivos “que nos han provisto de propósito y que le han dado sentido a nuestro quehacer y a nuestro trabajo”.
“Para la generación 2018, no es baladí recordar, por ejemplo, que la gratuidad en nuestra Institución bordea el 75%, que existe una matrícula femenina del 58%, que el 38% de los estudiantes de los Campus Osorno y Puerto Montt se reconocen de ascendencia mapuche, y que el 98% de los estudiantes de los mismos campus provienen de colegios municipales y subvencionados”, indicó.
Del mismo modo, subrayó que nuestra Universidad se ha definido como una entidad académica de educación superior de tipo “estatal, autónoma y regional, con un sentido demócrata y humanista”.
“Precisamente, las características que he nombrado, también nos obligan al cumplimiento de otro tipo de responsabilidades que son las responsabilidades de memoria, las responsabilidades de saber tejer el hilo –a veces confuso, a veces delicado– entre pasado, presente y porvenir”, dijo.
Por su parte, María Paz Contreras Muñoz, jefa de Gabinete y representante del Rector de nuestra Casa de Estudios, Óscar Garrido Álvarez, sostuvo que la educación se ha constituido como un articulador clave “de la aspiración por la promoción de políticas públicas de naturaleza más inclusiva y también por un fortalecimiento de lo público”.
“Es la propia sociedad chilena la que con energía nos señaló la necesidad de que el país se detenga a observar, con sentido crítico y con un anhelo de transformación, lo que se ha construido como sistema educativo y los efectos que esto ha tenido como política de acceso a la formación y el conocimiento”, puntualizó.
Igualmente, recalcó que las universidades “hemos sido interpeladas por la sociedad en nuestro quehacer institucional, en la forma cómo estábamos funcionando, y en los bienes que estábamos produciendo”.
“Lo anterior ha contribuido a dinamizar el debate sobre la educación, lo que nos obliga –como comunidad universitaria– a interpretar y a procesar responsablemente este anhelo y relato ciudadano”, agregó.
En tanto, el director ejecutivo de Conicyt, Christian Nicolai, agradeció la invitación a la ceremonia, y enfatizó que “para nosotros son importantes las universidades regionales, y por tanto, vamos a seguir colaborando a través de los instrumentos de Conicyt, de los distintos concursos y del programa regional, para que efectivamente se pueda hacer más ciencia en regiones, con el entendido de que la métrica siempre es la excelencia”.
Conferencia
En su clase magistral, el presidente del Senado, Carlos Montes, se preguntó en el contexto del debate sobre educación en nuestro país, “¿qué tan lejos o cerca estamos de lo ocurrido en Córdoba y en el París del 68? ¿Qué preocupaciones de los jóvenes de esas épocas siguen vigentes hoy? ¿Tiene algo de esos momentos la movilización estudiantil que vivimos el 2006 y el 2011?”.
“Parece importante hacerse esas preguntas e intentar reflexionar sobre ello”, comentó.
En esa línea, aseguró que “los avances sociales y culturales no son automáticos, no se logran en un momento, no son fruto de una generación, generalmente son parte de procesos históricos que tardan años y a veces décadas en germinar, pero que van logrando sus objetivos gradual y paulatinamente. No es posible no encontrar una cierta conexión entre estas manifestaciones estudiantiles”.
A su vez, el Parlamentario destacó la relevancia de los planteles públicos y su incidencia directa en el modelo de sociedad y desarrollo “que queremos”. Añadió que “de la visión y sentido de país que tengan los líderes y profesionales que se formen en estas aulas hoy, depende la orientación que tendrán nuestras políticas públicas en el futuro”.
“La universidad del Estado no es una institución más en el mercado de la educación, sino que tiene una misión diversa especialísima; aquí se radican los objetivos e intereses permanentes de la nación chilena, este es el lugar para pensar en aquellas materias que posibilitan y condicionan nuestro desarrollo, este es el lugar acerca de las perspectivas del país y los chilenos”, remarcó.
Finalmente, recordó la reciente aprobación de la Ley de Universidades Estatales, la que incorpora “un plan especial de recuperación, con una cantidad moderada pero interesante de recursos, que deben permitir avanzar en algunos objetivos centrales, como el aumento de matrícula, la mejora de la calidad docente, la mantención y renovación de infraestructura, investigación sobre los grandes temas nacionales y el trabajo en red”.
Tras su intervención, el presidente del Senado recibió un galvano confeccionado a mano en madera nativa de alerce por el orfebre Vitalicio Jaramillo. En su interior se puede apreciar una pieza de joyería trabajada en lapislázuli, jade y alpaca que representa el isotipo de nuestra Universidad.
La ceremonia fue amenizada con la presentación de la agrupación formada por docentes de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE), Trío de Cámara, quienes interpretaron piezas musicales del compositor austriaco Franz Joseph Haydn.